Los vínculos de amistad son muy importantes en la vida de todas las personas, pues forman parte de nuestra indispensable estructura afectiva. Se trata de compañeros que se escogen a lo largo de la vida, con los que compartimos momentos de alegría o de tristeza, que son apoyo y también motivo de múltiples celebraciones.

Hay muchos tipos de amistad, ya que algunas de estas personas llevan recorrido un largo camino a nuestro lado desde la infancia, mientras que otras han aparecido en la universidad, practicando una afición o como compañeros de trabajo, ¡hay miles de formas de conectar con nuevos amigos!

Por fuerte que parezca este lazo que se ha cosechado, a veces se pasa de hablar todos los días y contar todas las confidencias a no comunicarse sin motivo aparente. ¿Por qué ocurre esto en algunas ocasiones?, ¿cómo actuar ante esta circunstancia?

¿En qué momento se produce el distanciamiento con un buen amigo?

Las etapas de la vida son cambiantes para todas las personas, por esto mismo, conocer el momento en el que surge la distancia es un paso muy importante. A veces en esto está la respuesta o el motivo que os ha llevado a esta situación, sin necesidad de que exista un conflicto real entre los dos o sin que sea síntoma de que el vínculo se ha roto para siempre.

Puede producirse por cambios significativos como la llegada de una nueva pareja, un cambio de residencia o un momento personal difícil que puede estar pasando la otra persona. En estos casos puede variar la forma en la que uno se comunica con sus amistades durante un tiempo e incluso lleva a “desaparecer del mapa” a ciertas personas. Puedes entender un poco mejor estos entresijos de la amistad en AmistadyMas.com donde explican también cómo acercarse a los amigos o planes que se pueden hacer con ellos, algo que puede resucitar un poco la relación. 

Cómo actuar cuando se pasa de hablar todos los días a no hablar

Si los amigos te fallan, dejan de hablarte o la comunicación empieza a escasear en un momento dado, hay diferentes cosas que puedes hacer. Esto es lo que te recomendamos:

  • Un diagnóstico. Pensar en el foco del distanciamiento es un buen primer paso. Como indicamos anteriormente, puede ser algo eventual por circunstancias de la vida, o puede venir derivado de un conflicto entre ambos. El modo de actuar o de solucionarlo puede ser muy diferente según el caso.
  • Comunicación. Con un buen amigo debes poder hablarlo todo y comunicarte con franqueza. Preguntar si algo le ha molestado o comentarle que has notado un distanciamiento puede crear un diálogo de lo más clarificador. A veces nos hacemos muchas teorías en nuestra cabeza de lo más complicadas y basta con hablar con la otra persona para descubrir que realmente no pasaba nada tan importante, o que fue solo una cuestión de falta de tiempo.
  • Empatía y espacio. Puede que tu amistad necesite algo de tiempo para resolver sus asuntos o para estar en soledad. Parte de ser un buen amigo pasa por respetar su espacio pacientemente, dejar que actúe como considera para sentirse mejor y estar ahí para cuando vuelva a necesitarte. 
  • Encárgate de tu parte. No podemos dominar lo que hacen o piensan otras personas, pero sí manejamos nuestras propias reacciones. El mejor consejo es que hagas lo que consideres oportuno, como hablar con esa persona y tender tu mano, para que te quedes tranquilo sabiendo que has actuado como un buen amigo que comprende y respeta. Lo demás, siempre estará en la mano del otro.
  • Aprovecha tu tiempo. Por último, nuestra recomendación es que aproveches tu tiempo y no te quedes anclado en esa amistad. Busca nuevos ambientes, usa ese tiempo que antes invertías en esta persona para conocer a gente nueva y sigue creciendo individualmente. 

Los cambios de fase: crucial en la amistad

A veces nos quedamos pensando en esa amistad y queremos retenerla por todo ese cariño que hemos cosechado juntos. Sin embargo, cuando pasas de hablar a diario hasta el contacto cero, a veces quiere decir que tiene los días contados y que esa etapa se terminó. 

¿Es tan malo que una maravillosa amistad tan estrecha llegue a su fin y se distancie? No necesariamente. En muchas ocasiones, las fases de la vida van cambiando nuestras afinidades o prioridades, así que puede ser algo tan natural como positivo para los dos. 

Amigos que son de toda la vida pueden dejar de tener tema de conversación y temas en común simplemente porque han tomado caminos diferentes con el paso de los años. Si uno está volcado en su pareja, su familia o la paternidad y el otro se centra en las salidas de ocio y en su carrera, simplemente puede ser una cuestión de incompatibilidad. Lo natural es que el primero haga nuevas amistades en su misma situación y planes familiares, mientras que el otro se sentirá más en armonía con compañeros de trabajo que comparten sus ambiciones y con los que salir los fines de semana, ¡ley de vida!

Crear nuevas amistades y vínculos

Crear nuevas amistades y vínculos es una buena forma de naturalizar que esta relación se ha resentido y dar pie a que surjan nuevas oportunidades afectivas. No te pierdas nuevos compañeros y apoyos a tu alrededor por perder a uno que considerabas valioso. Aquí te mostramos algunas ideas para aumentar tu círculo social y hacer nuevos amigos que pueden durar, ¿quién sabe? Toda la vida.

El mundo digital

En la era de internet no hay lugar más amplio para hacer nuevas amistades que las redes sociales o las aplicaciones. Si te introduces en foros de opinión, hablas con tus seguidores de Instagram o descargas apps sobre cosas que te gustan, por ejemplo, los deportes, puedes terminar por crear amistades que tienen mucho en común contigo. Incluso jugando a videojuegos en línea se llegan a crear vínculos muy interesantes y fuertes.

Aficiones y clases

Es interesante que los amigos puedan compartir cosas que les interesan a los dos y estas pueden ser muy diferentes en cada caso. Si adquieres alguna afición o te apuntas a clases de una nueva disciplina, como el baile o la fotografía, puedes estrechar lazos con otras personas muy enriquecedoras que compartan contigo ese mismo interés.

El trabajo o el colegio

No importa la edad, pues tanto el colegio como la universidad o el trabajo son ambientes en los que se pueden gestar fantásticas relaciones personales. En estos entornos se comparten retos y se actúa con compañerismo, se ven las mismas caras diariamente y se pueden construir relaciones muy interesantes.

Nuevos entornos

Salir de nuestra zona de confort nos puede ayudar mucho a cambiar el ambiente y conocer a personas increíbles. Basta con dejar de ir al bar de siempre o hacer planes en las mismas zonas para que puedas enfrentarte a un contexto social nuevo con otras oportunidades para crear amistad.